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¿Qué tener en cuenta al contratar un Abogado de Derecho Mercantil de Girona?

Abogados empresas: guardianes de tu negocio

En el competitivo mundo de los negocios, una buena asesoría jurídica puede marcar la diferencia entre el triunfo o la ruina, entre el éxito o el fracaso. La empresa o negocio que no necesite alguna vez de los servicios profesionales de un abogado, sencillamente no existe.
Los abogados empresas son consejeros legales capaces de aplicar fórmulas y herramientas que coadyuven en la resolución de conflictos. Intervienen, por ejemplo, en disputas entre empresas, formalizan un negocio mediante un acuerdo de contrato, estudian y aplican las leyes que autorizan o regulan el funcionamiento de un negocio, comercio, pymes, entre otros.
El trabajo colaborativo entre abogado y empresario es primordial también para prevenir la ocurrencia de eventos no deseados que pueden generar problemas de alto impacto en la productividad. La idea es que un abogado no se limite a la elaboración de un contrato o la reclamación, por ejemplo de deudas o impagos. Se trata de ejercer un Derecho preventivo, que ayude a evitar impactos negativos con pérdidas económicas y problemas legales que inciden en la productividad.
Los abogados empresas en modo alguno son adivinos o brujos. Pero sí saben identificar las amenazas de un entorno cambiante, donde las leyes también son dinámicas y quien no se entere de nuevas regulaciones, puede pagar altos costes. Un negocio en ambientes de incertidumbre puede poner en riesgo el patrimonio de los socios, afectar la rentabilidad, el clima laboral y acarrear pérdidas. Por eso los consejeros legales son vitales para la dirección ejecutiva, presidencia o gerencia general de una empresa, no importa su naturaleza.
En síntesis, son custodios de las empresas, porque tienen la misión primordial de orientar y proteger los intereses de sus clientes, a fin de que la gestión empresarial sea exitosa y de muy bajo riesgo.

Abogados startups y nuevas tecnologías para el Derecho

Uno de los problemas del ejercicio profesional del Derecho y de la Administración de justicia en general, es el rezago, la resistencia al uso de nuevas tecnologías en el trabajo cotidiano, mientras el entorno se mueve en un mundo cada vez más virtual que facilita la vida de todos.
Por eso no es una exageración señalar que el sector de la justicia, con sus abogados incluidos, no es precisamente el más innovador. Son grandes productores de archivos de papeles generados en miles de millones de expedientes alrededor del mundo. Es por ello, por ejemplo, que en España comenzó en el año 2016 un proyecto que pretende acabar con el uso del papel en juzgados y tribunales, gracias a la implantación de una plataforma que modernice algunos procesos judiciales.
En el llamado libre ejercicio del Derecho privado también se han visto algunos cambios en la forma de gestionar los servicios jurídicos de los bufetes. Cada vez hay más consultas virtuales, uso de la nube en internet para guardar archivos (expedientes) y procedimientos totalmente automatizados para agilizar la gestión y solución de casos.
Hay otra línea de acción que persigue más bien la sustitución de los jurisconsultos en tareas y actividades donde no son indispensables. Un ejemplo claro es la aparición de los servicios startups on line, donde se pueden gestionar servicios puntuales sin necesidad de que intervenga un abogado. Tal es el caso de la redacción de contratos, donde se puede acceder a una plataforma virtual y buscar el tipo de contrato que se desea pactar en tiempo record y a bajo coste.
Formaldocs es una startup española, creada con esta finalidad por la aragonesa Iris San Martin, quien logró desde esta plataforma de bajo coste ofrecer a los usuarios de su aplicación servicios para la creación de contratos personalizados de alquiler, compraventa y hasta pactos entre socios, por costes realmente bajos que oscilan desde los 10 a los 23 euros. Oferta contra la cual no pueden competir bufetes que mínimo cobran honorarios que superan entre 20 a 30 veces esos precios solidarios.
Y todo esto con la idea que los clientes puedan gestionar una consulta on line, para ganar tiempo y ahorrar costes, para enterarse de las diligencias emprendidas por su abogado de confianza o sencillamente, redactar un testamento con tan solo acudir a una plataforma denominada Willing, donde se cuelgan las últimas voluntades de nuestros seres queridos.
Sin embargo, existe un estudio efectuado por la consultora Mckinsey & Company donde se señala que apenas el 13% de las actividades desarrolladas por un jurista, son potencialmente asumibles por la denominada inteligencia artificial, así que no hay motivos para alarmarse y creer que los abogados desaparecerán de la faz de la tierra.

Abogados Compliance: protección de vanguardia para empresas

Una de las tendencias en Derecho que pone a las empresas a la vanguardia de la prevención, es crear modelos de organización y gestión que incluyan planes destinados a identificar procesos de trabajo donde pueden desencadenarse delitos, con herramientas de monitoreo o vigilancia idóneas que contribuirán a disminuir los riesgos que impactan la productividad y la rentabilidad de las empresas.
Eso justamente hacen los Abogados compliance. Son expertos en la implantación de estos modelos preventivos, previo estudio de la organización, elaborando mapas de riesgo que ayudan a la creación de protocolos y procedimientos adecuados adaptados a la realidad y naturaleza de la empresa, a fin de combatir delitos tales como: blanqueo de capitales, sobornos, estafas, corrupción en general.
Los Abogados Compliance crean sistemas de protección de datos y canales de denuncia y sistemas disciplinarios internos destinados a cuidar el patrimonio empresarial, pero también verifican la efectividad en el tiempo de este modelo de prevención y aplican correctivos cuando corresponda.

Abogados franquicias: especialistas del éxito

Abogados franquicias son especialistas en atender todo lo concerniente a las actividades desplegadas en esta especial forma de hacer negocios, donde existen dos partes que comparten dividendos: un franquiciado y un franquiciador.
En este modelo de negocios, el franquiciado da al franquiciador el derecho de usar el nombre, modelo, sistema o técnicas al franquiciado, a fin de obtener como contraprestación una suma de dinero, un ingreso económico por la cesión de algunos derechos.
Aquí se establecen contratos atípicos, donde se halla implícita trasmisión de conocimiento y la buena voluntad de las partes, pero en ocasiones las relaciones entre las dos figuras suelen ser conflictivas a consecuencia de algunas condiciones impuestas por los franquiciadores que traen problemas hasta judiciales, toda vez que los franquiciadores suelen lograr ser eximidos de cualquier responsabilidad sobre el negocio.
Por eso la figura de los Abogados franquicias adquiere relevancia desde el momento mismo en que comienza la relación de negocios, porque son ellos los expertos en la elaboración de cláusulas contractuales que pueden equilibrar los intereses en beneficio de ambas partes.
España es uno de los países europeos que tiene pocas regulaciones en el tema de las franquicias, donde existe un articulado de Ley que aunque tipifica o caracteriza a groso modo esta actividad comercial, no así la fórmula específica de su contrato, ya que no hay referencias a nivel jurídico sobre las mismas, reconociéndose únicamente el contrato donde la franquiciadora cede el derecho de explotar un sistema determinado, a un franquiciado.
Aunque también es verdad que los negocios de este tipo son aconsejables para emprendedores que apuestan a fortalecer una marca, producto o servicio que ya ha sido admitida por el mercado, sobre la cual hay un sistema de comercialización puesto en marcha, por lo que esos riesgos se reducen significativamente, en vista de que no se trata de una nueva inversión en un producto o servicio desconocido en el mercado.
Del mismo modo, las franquicias cuentan con una denominación social conocida, sólida en su segmento de negocio y que ya tiene un público consumidor cautivo, por lo que existe control sobre todas las variables de producción, suministro y distribución de los productos o servicios, hasta con entrenamiento incluido.
Por todas estas variables, los Abogados franquicias son vitales para asegurar con claridad meridiana las condiciones y derechos de la explotación de ese negocio o servicio, donde igualmente se puede vulnerar la propiedad intelectual. Así que lo aconsejable es buscar al especialista idóneo en el tema para no atravesar una zona de riesgo innecesaria.

Abogados franquicias: especialistas del éxito

Abogados franquicias son especialistas en atender todo lo concerniente a las actividades desplegadas en esta especial forma de hacer negocios, donde existen dos partes que comparten dividendos: un franquiciado y un franquiciador.
En este modelo de negocios, el franquiciado da al franquiciador el derecho de usar el nombre, modelo, sistema o técnicas al franquiciado, a fin de obtener como contraprestación una suma de dinero, un ingreso económico por la cesión de algunos derechos.
Aquí se establecen contratos atípicos, donde se halla implícita trasmisión de conocimiento y la buena voluntad de las partes, pero en ocasiones las relaciones entre las dos figuras suelen ser conflictivas a consecuencia de algunas condiciones impuestas por los franquiciadores que traen problemas hasta judiciales, toda vez que los franquiciadores suelen lograr ser eximidos de cualquier responsabilidad sobre el negocio.
Por eso la figura de los Abogados franquicias adquiere relevancia desde el momento mismo en que comienza la relación de negocios, porque son ellos los expertos en la elaboración de cláusulas contractuales que pueden equilibrar los intereses en beneficio de ambas partes.
España es uno de los países europeos que tiene pocas regulaciones en el tema de las franquicias, donde existe un articulado de Ley que aunque tipifica o caracteriza a groso modo esta actividad comercial, no así la fórmula específica de su contrato, ya que no hay referencias a nivel jurídico sobre las mismas, reconociéndose únicamente el contrato donde la franquiciadora cede el derecho de explotar un sistema determinado, a un franquiciado.
Aunque también es verdad que los negocios de este tipo son aconsejables para emprendedores que apuestan a fortalecer una marca, producto o servicio que ya ha sido admitida por el mercado, sobre la cual hay un sistema de comercialización puesto en marcha, por lo que esos riesgos se reducen significativamente, en vista de que no se trata de una nueva inversión en un producto o servicio desconocido en el mercado.
Del mismo modo, las franquicias cuentan con una denominación social conocida, sólida en su segmento de negocio y que ya tiene un público consumidor cautivo, por lo que existe control sobre todas las variables de producción, suministro y distribución de los productos o servicios, hasta con entrenamiento incluido.
Por todas estas variables, los Abogados franquicias son vitales para asegurar con claridad meridiana las condiciones y derechos de la explotación de ese negocio o servicio, donde igualmente se puede vulnerar la propiedad intelectual. Así que lo aconsejable es buscar al especialista idóneo en el tema para no atravesar una zona de riesgo innecesaria.