Si te han despedido de tu trabajo y no estás seguro de cómo proceder, no dudes en contactar a un abogado especializado en despidos para que te asesore. Contar con un profesional experimentado que pueda proteger tus derechos será de gran ayuda durante todo el proceso. Si te encuentras en Málaga, a continuación encontrarás toda la información relevante sobre los mejores profesionales en esta área.
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¿Qué tener en cuenta al contratar un Abogado de Despidos?
¿Qué tipos de despido existen en España?
En España, existen tres tipos de despidos que una empresa puede llevar a cabo, y cada uno de ellos implica un proceso diferente. Estos son el despido objetivo, el despido disciplinario y el despido colectivo.
El despido objetivo ocurre cuando, por razones económicas, técnicas, organizativas o de producción, una empresa decide despedir a un número determinado de trabajadores. Sin embargo, también puede haber otras razones atribuibles al trabajador, aunque no sea su culpa.
Por ejemplo, si un trabajador no logra adaptarse a modificaciones técnicas a pesar de recibir la capacitación correspondiente, la empresa puede aplicar un despido objetivo. En este caso, la empresa debe haber otorgado al trabajador un período de adaptación mínimo de dos meses. Otras razones atribuibles al trabajador incluyen la falta de capacidad física o mental para realizar el trabajo o tener un alto porcentaje de ausencias injustificadas, llegando al 20% de las jornadas laborales durante dos meses consecutivos, incluso si las ausencias están justificadas.
El despido disciplinario ocurre cuando la causa del despido es imputable al trabajador. Las causas de este tipo de despido pueden incluir ausencias o llegadas tarde repetidas e injustificadas, desobediencia a las órdenes de los empleadores, acoso laboral, violencia verbal o física, o una disminución del rendimiento del trabajador, ya sea voluntaria o debido a embriaguez o consumo de drogas.
El despido colectivo, también conocido como ERE, se produce cuando una empresa decide despedir a un gran número de trabajadores debido a graves problemas económicos, técnicos, organizativos o de producción.
¿Puedes ser indemnizado por un despido improcedente?
En casos de despido improcedente u objetivo, el trabajador tiene derecho a una indemnización que se calcula en función de tres factores principales: las causas del despido, el salario y los años de antigüedad en la compañía.
Cuando ni la empresa ni el trabajador son culpables del despido, como podría ser el caso de graves problemas económicos de la empresa, la indemnización es de veinte días de salario por año trabajado, con un máximo de doce mensualidades.
En el caso de despidos improcedentes, las indemnizaciones se calculan considerando la fecha de firma del contrato. Si la firma tuvo lugar después del 12 de febrero de 2012, la indemnización será de treinta y tres días por año trabajado con un máximo de veinticuatro mensualidades.
La indemnización mixta se aplica cuando el contrato de trabajo se firmó antes del 12 de febrero de 2012. El período de trabajo anterior a esa fecha recibirá una indemnización de 45 días de salario por año trabajado con un máximo de 42 mensualidades. A partir del 12 de febrero de 2012, la indemnización será de 33 días de salario por año trabajado con un máximo de 24 mensualidades.
Independientemente de la causa del despido, todo trabajador recibirá el finiquito, que no es lo mismo que la indemnización. El finiquito corresponde al pago de las vacaciones no disfrutadas hasta la fecha del despido, los días trabajados del mes en que se produjo el despido y las horas extras.
¿Por qué es recomendable contratar un abogado especializado en despidos?
Como hemos observado, el cálculo de una indemnización en casos de despidos improcedentes es complejo y requiere tener en cuenta un gran número de factores para garantizar que el valor recibido sea el correcto. Es recomendable contar con el asesoramiento de un abogado especializado en despidos para asegurarnos de que la indemnización sea la adecuada según lo establecido en la ley.