Existen dos pilares principales en la nueva ley de discapacidad en España. La primera es la defensa de la capacidad de decisión del individuo y la segunda la sustitución de la figura del tutor legal por un guardador o curador. En ese marco, a continuación veremos las novedades de dicha ley y sus implicaciones.
Reconocimiento de libertades y derechos
Como mencionamos anteriormente, la nueva ley incorpora la defensa de la capacidad de decisión del individuo, lo cual es muy positivo para quienes tienen algún tipo de discapacidad. Anteriormente eran otras personas quienes decidían por ellos, en aras de una supuesta protección de sus intereses. Por supuesto, esto privaba su libertad de elección en asuntos en los que son perfectamente capaces de elegir lo que quieren hacer.
Sobre la sustitución de la figura del tutor legal por un guardador o curador. Esto complementa el punto anterior, pues en algunos casos a la persona implicada no le será posible gestionar adecuadamente sus demandas y deseos. Es en ese punto en donde entran juego los guardadores y curadores, quienes proporcionarán ayuda práctica para que pueda llevar a cabo sus decisiones.
Podemos entender mejor las implicaciones si consideramos que anteriormente no podía una persona con discapacidad tomar algunas decisiones de trascendencia, como ejercer su propia patria potestad y la de sus hijos, derecho a contraer matrimonio y decidir con quién vivir.
Límites acordes a la situación de cada persona
Es evidente que deben existir límites razonables de acuerdo a la situación de cada persona, pero sin truncar innecesariamente su libertad de decisión. Por ejemplo, es posible que necesiten asistencia para el mejor proceder en cosas trascendentales, como la venta de una casa. Además, cuando existe el peligro de que la decisión en cuestión sea perjudicial, quizá sea recomendable que la libertad de elección de la persona con discapacidad sea limitada. Podemos entender este punto si pensamos en un individuo que ha empezado a coleccionar artículos que son dañinos para su salud, quizá por ser contaminantes o hasta venenosos. Aunque está ejerciendo su derecho, lo cierto es que este hábito es perjudicial. Entonces, será necesario limitar su libertad de elección y en esos casos la nueva ley de discapacidad en España no representará un cambio significativo para ellos en muchos campos.
Aún así, es un avance considerable en muchos aspectos. De hecho, anteriormente a las personas con alguna discapacidad se les permitía trabajar, pero no podían decidir sobre la forma en que usarían su dinero. Actualmente se les reconoce su derecho, lo cual es lógico pues si son capaces de trabajar también deberían ser capaces de determinar en qué gastar sus ingresos.
Otro aspecto positivo de la nueva ley de discapacidad en España es que les permite a las personas implicadas decidir sobre otros aspectos fundamentales, como elegir a la persona que deberá atender sus necesidades cuando vea mermadas sus capacidades mentales a un grado mayor. Por supuesto, esto implica decidir quién ejercerá su patria potestad cuando ya no pueda hacerlo por sí misma, con la implicaciones legales que eso conlleva.
De hecho, este último punto debe ser de interés para todas las personas, sin importar su situación actual. Existe la posibilidad que un individuo que actualmente no tenga alguna limítate intelectual la llegue a tener dentro de unos años. En ese caso, al notar que va perdiendo sus capacidades mentales, podrá indicar con anterioridad lo que espera que se haga cuando ya no pueda valerse por sí mismo ni ser consciente de sus decisiones.
Por supuesto, para conocer las implicaciones en cada caso, lo mejor es contar con la asesoría de abogados expertos en el tema.